Mi sueño perfecto!

Hace un par de noches tuve un sueño, partió como un cuento de hadas, con maripositas, harto brillo y unicornios, pero terminó como una pesadilla, ad-hoc para Halloween.

Pero partamos por las hadas… El escenario; un prado verde recién cortado, el aire con un leve aroma a manzanas frescas, el sol a temperatura perfecta (en el sol había harto, harto brillo). Escenario natural interrumpido sólo por un mantel cuadrille, una cesta de cosas ricas y un par de copas de champagne. Ahí, ÉL y yo, solos, mirándonos en silencio durante prolongados minutos de perfección.

Pero ÉL no contento con tanta perfección y dulzura quiso agregar el toque mágico al encuentro, puso su mano en el bolsillo y extrajo una pequeña cajita (rosada y con brillos plateados, porque era un cuento de hadas, ok?), luego extendió su brazo, abrió el cofrecito y…¡Sorpresa! Casi enceguezco con tanta luz, una sortija irrumpió en mi sueño para decirme ¿Quieres casarte conmigo?

Hasta ahí llego la parte de haditas y mariposas, porque en un santiamén y sin decir palabra alguna, arranque, salí corriendo a la velocidad de una maratonista (que claramente no soy) y me refugié en un túnel oscuro, sin salida, pero en el que me sentía mucho más segura que en aquél paradisiaco escenario.

Chicas, mi sueño era PERFECTO, tenía a mi príncipe azul (y un unicornio de yapa), sólo tenía que decir que SI, y probablemente el sueño iba culminar en mi propia fiesta de matrimonio.
Pero No! Hasta en los sueños existen los pastelazos, en vez de probarme la sortija, salí corriendo como fugitiva… ¿Me estará aconsejando mi inconciente? ¿Les pasa lo mismo a ustedes? Es que con tanta amiga que se casa!

Como consejo, si llegan a soñar algo similar, aguántense unos segundos más, digan que SI, para saber como va a ser el vestido, la fiesta, todo! Por ultimo, salgan corriendo cuando les toque decir “SI, acepto”. Total, es un sueño!